Elogio de la soledad

Cuando el famoso escritor budista Stephen Batchelor cumplió sesenta años, tomó un año sabático de su enseñanza y dirigió su atención a la soledad, una práctica integral de las tradiciones meditativas que ha estudiado y enseñado durante mucho tiempo. Su objetivo era aventurarse más profundamente en la soledad, descubriendo todo su alcance y profundidad. Pasar tiempo en lugares remotos, apreciar y hacer arte, practicar meditación y participar en retiros, beber peyote y ayahuasca, y entrenarse para mantener una mente abierta e inquisitiva han contribuido a la capacidad de Batchelor de estar solo y a la vez en paz. Esta es una mezcla de su narrativa personal y con historias inspiradas de los practicantes devotos de la soledad, desde el Buda hasta Montaigne, y desde Vermeer hasta Agnes Martin. Stephen Batchelor. Urano.